En el año 2000, en el vibrante corazón de la Ciudad de Guatemala, un grupo de amigos apasionados por la rica cultura y tradiciones del país decidió emprender un viaje para preservar y compartir las costumbres locales a través de un emprendimiento único. Así nació MOMOSTITLAN, una tienda que se convirtió en un símbolo de la autenticidad guatemalteca.
La idea surgió durante un paseo por el Mercado Central, un lugar emblemático que refleja el bullicio y la diversidad de la vida cotidiana guatemalteca. Los fundadores, inspirados por la tradición de la venta de productos típicos y artesanías en este histórico mercado, vieron una oportunidad para ofrecer un pedacito de Guatemala a cada visitante.
MOMOSTITLAN se dedicó desde sus inicios a ofrecer una amplia gama de productos tradicionales que van desde textiles hechos a mano hasta deliciosas comidas típicas. Cada artículo en la tienda cuenta una historia, ya sea de la habilidad de los artesanos locales que elaboran las coloridas piezas de tela, o de las recetas transmitidas de generación en generación que se encuentran en los productos alimenticios.
A lo largo de los años, MOMOSTITLAN ha mantenido su compromiso con la calidad y la autenticidad, apoyando a los productores locales y preservando las técnicas tradicionales. La tienda no solo es un lugar para comprar, sino un punto de encuentro cultural donde los visitantes pueden aprender sobre las tradiciones de Guatemala, experimentar su cálido folklore, y llevarse un recuerdo auténtico de su visita.
Hoy en día, MOMOSTITLAN sigue siendo un lugar de referencia en el Mercado Central, continuando con la misión de celebrar y compartir la herencia cultural de Guatemala con el mundo. Con cada producto y cada sonrisa, la tienda mantiene viva la esencia de la rica cultura guatemalteca, ofreciendo un pedacito de su historia a todos aquellos que cruzan sus puertas.